Hemos empezado la semana con una nueva noticia luctuosa sucedida en plena carretera: la muerte de un compañero, operador de auxilio en carretera, mientras realizaba un servicio de asistencia en carretera en la AP-1, a la altura de Monasterio de Rodilla, en Burgos. Se trataba de un hombre de 50 años que, según ha publicado Burgos Conecta, fue atropellado por un camión cuando atendía un turismo averiado. Desde la Red de Empresas de Auxilio en Carretera (REAC) queremos mostrar nuestro pesar por los sucesos acaecidos; pero también queremos preguntarnos si sería posible erradicar estos accidentes.
¿Seguridad vial qué es? ¿Reducir la velocidad si se divisa un accidente? Por supuesto que sí. Se pueden, así, prevenir accidentes fatales como este. Estamos hablando de un “accidente dentro de un accidente” que podía haberse evitado. La comunidad de operadores del auxilio en carretera lo recuerdan, cada cierto tiempo, en sus redes sociales y blogs, con un mensaje claro. Instando a los vehículos a dejar una distancia entre ellos y las grúas de 3 metros. Exhortando al cuidado cuando pasamos junto a un siniestro o incidente.
Las compañías de asistencia en carretera envían a los conductores de grúas para que realicen su trabajo, no para encontrar la muerte. Como le pasó en julio de 2017 a un conductor en la A2 a la altura de Alcarràs (Lleida); el accidente, donde resultaron heridas otras dos personas, lo recogió El Periódico. Ese mismo año, en septiembre, moría en Sagunto otro operador de auxilio en carretera, engrosando una lista en Valencia compuesta por cuatro profesionales, en total, fallecidos de 2014 a 2017.
Fuente: Grupo DOCU, agrupado de REAC
Empresas como Grupo Docu -agrupado de REAC- recuerdan, desde su web, que aminorar la velocidad y adelantar al grupo formado por las grúas de auxilio y los vehículos accidentados guardando una distancia de seguridad de 3 metros es indispensable. Nos va la vida en ello.